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Cultura

5 de Septiembre en Juchitán

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Cada 5 de Septiembre en Juchitán hay desfile de los estudiantes de todos los niveles. Hay también desfile militar y por la noche el ayuntamiento ofrece una fiesta, la Vela 5 de Septiembre. Es la celebración de aquella batalla entre juchitecos y los soldados franceses que llegaron para apuntalar el imperio de Maximiliano de Habzburgo y su esposa Carlota en 1864.


Los que han odiado a Juárez y el bienestar del pueblo; que para ellos no cuentan ni como persona ni como mexicano, son los Conservadores que se hicieron ricos en el cultivo del campo, y en la explotación minera.
Ya se imaginarán las toneladas de oro y plata que los barcos llevaron a España para el rey español desde que llegaron aquel 21 de julio de 1519 comandado por Hernán Cortés; de ahí hasta 1810 que el cura Hidalgo proclamó nuestra Independencia; México desde entonces se convirtió en un campo con olor a pólvora. Juárez se convierte en presidente de México en enero de 1857; la Constitución de 1857 estaba por aprobarse donde La Ley Juárez de noviembre de 1855 suprime los privilegios de los religiosos y militares; y La Ley Lerdo de junio de 1856 expropia los bienes del clero.
En una palabra, se dejaba fuera del poder político a la Iglesia; esto no lo permitiría la Iglesia ni para sus seguidores o allegados los Conservadores; ¡de ninguna Manera el populacho y el indígena llegaría a tener poder ni un cachito de Derecho de más, eso! ¡Nunca¡
La Iglesia arma a sus generales se declaran en guerra contra el indio Juárez con el plan de Tacubaya con el fin de impedir que la Constitución de 1857 ya aprobada por el Congreso se aplique.
A la guerra contra México es decir contra los Liberales que serían los ministros del gobierno de Juárez y contra Juárez el presidente. Se va México a una guerra que duraría 3 años llamada Guerra de Reforma que acabaría en 1860.
Amigos, triunfante el gobierno Juarista, se pensó que ya todo había acabado. Por fin México en paz y en armonía para progresar. ¡Pues no! Desembarcan los franceses para cobrar una deuda económica a México. Juárez hace lo posible en evitar una confrontación con el gobierno francés, hace uso de la más fina diplomacia porque España e Inglaterra se retire que vinieron a cobrar juntos una suma de dinero que México según ellos les debía. Francia se queda, se adentra por Puebla; La Iglesia los recibe, les hace misa. Es en este año en que el General Ignacio Zaragoza se cubre de gloria y da el triunfo a México en aquel 5 de Mayo de 1862; que en La Casa Blanca se festeja tanto! Con mariachi y tequila cada año. En un año recuerdo que Barack Obama gritó: ¡Viva! México. En esta batalla aparece por primera vez el nombre de aquel coronel oaxaqueño, Porfirio Díaz. Es así que en el correr del tiempo llegamos a 1864; Los Conservadores que hasta hoy siguen dando lata al gobierno democrático del presidente AMLO. Fueron, viajaron a Europa, para pedirle a la Iglesia que nombre a un Emperador en México; quitar al indio Juárez que era el presidente y en su lugar en el Palacio Nacional suba un príncipe extranjero, de La Realeza, güero y de ojos azules.
Es así que Los Conservadores van al Palacio de Miramar a pedirle a Maximiliano acepte la Corona de México. Maximiliano llega en mayo de 1864 con su esposa Carlota. Juárez baja del Palacio Nacional con la bandera mexicana en el pecho y recorre la parte norte del país; vive en Cd. Juárez; organiza, coordina la defensa de México.
¡Los Conservadores que han sido ambiciosos en lo material, se creen de sangre azul y no quieren saber nada! Del populacho. Sus nombres de pila son por ejemplo Felipe Corazón de Jesús; no se consideran mexicanos, desprecian al pobre, al indígena; su objetivo es tener dinero. ¡Por eso! Como nunca Fox y Calderón amasaron grandes fortunas del erario público. ¡Con anuencia claro! De Salinas y de Zedillo por nombrar dos traidores de México.

El supuesto imperio de Maximiliano finaliza con su fusilamiento en Querétaro el 19 de junio de 1867. Es así que Juárez regresa y entra a la CDMX en julio de ese año. El General Porfirio Díaz había derrotado a los franceses en varias plazas de México: el 3 de octubre, el 28 de octubre de 1866 el triunfo de La Carbonera, hasta culminar la victoria contra el ejército francés el 2 de abril de 1867.
México con El Soldado de La Nación que así le llaman al General Porfirio Díaz, llega y entra a la CDMX en junio y da una orden, ¡cuidado! Quien robe en las casas y cometa actos de rapiña: ¡Lo fusilo!
Amigos, ¿y el 5 de Septiembre de 1866? Pues es el triunfo de los juchitecos, ixtaltepecanos, espinaleños, sanblaseños; los de Chicapa, Unión Hidalgo, Xadani… Sobre los franceses comandados por el Coronel Crisóforo Canseco. Unidos en una sola bandera, único camino; el camino liberal de Juárez, el camino del pueblo.
Fue el primer triunfo sobre el ejército francés en México. Los tehuanos no hicieron Unidad con Juárez, no hicieron Unidad con el Istmo, con los Tecos, de ahí el adjetivo de Traidor.
Recordemos este día a nuestros héroes juchitecos: Anastasio Castillo- Taachu Xaáda el primero en abrir fuego contra el enemigo -; Marcos y Amós Matus- son hermanos-; Felipe López Lena, Cosme Damián Gómez, Pedro Gallegos, Evaristo Matus, Albino Jiménez Binu Gáada-, Francisco León, el Padre Mauricio López ; Simona Robles, sus hermanas, Tona Tat’ti…El jefe político Máximo Pineda y el Coronel Crisóforo Canseco quien comandó a los Tecos, él era chiapaneco y murió en Juchitán.
Amigos una corona de laurel para la cien de nuestros héroes del 5 de Septiembre de 1866; a quienes Porfirio Díaz vino abrazar y loar por su triunfo e inspirarse él de esta gran hazaña épica istmeña. Así llegó a Juchitán a felicitar a los Tecos el 7 de enero de 1867 y se llevó hombres para la guerra y unos Tecos para darles estudio, ellos fueron: Rosendo Pineda, Juvencio Robles, Rosalino Martínez, Benigno Castillo…La historia de México amigos es un campo de batalla que huele a pólvora. México siempre ha salido adelante con su pueblo generoso, el pueblo que es la mayoría, es liberal y justo. Por eso ¡contra el pueblo nada! ¡Y con el pueblo todo! ¡Viva! Los pueblos istmeños. ¡Viva! México.

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Cultura

Juana Hernández López: La Voz de la Mixteca que resuena en la Guelaguetza 2024

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Una vida de lucha y dedicación que une fronteras y preserva la riqueza cultural de su comunidad

Oaxaca de Juárez, Oaxaca.- (Cortamortaja) 22 de Junio de 2024.- En el corazón de la Guelaguetza, la festividad más emblemática de Oaxaca, ha emergido una figura que encarna la resistencia, el amor por la cultura y la dedicación incansable a su comunidad. Juana Hernández López, originaria de Santiago Juxtlahuaca, ha sido coronada como la Diosa Centéotl 2024, una distinción que celebra no solo su belleza y carisma, sino también su extraordinaria trayectoria y compromiso social. Hoy, en un momento aún más significativo, Juana celebra su 65 cumpleaños, un detalle que añade más emoción y significado a su historia de vida.

Juana no es solo una docente de español e historia; es una narradora de la realidad y una guerrera por la justicia educativa. Su camino ha estado marcado por la adversidad y la migración, habiendo tenido que dejar su amado Juxtlahuaca para buscar oportunidades en Estados Unidos. Esta experiencia no la quebrantó, sino que la fortaleció, convirtiéndola en una voz poderosa para la comunidad migrante mixteca.

En Fresno, California, Juana tomó las riendas de Radio Bilingüe, entendiendo que cuando los migrantes cruzan las fronteras, llevan consigo más que pertenencias; llevan su lengua, su cultura y su identidad. Desde los micrófonos de la radio, Juana se convirtió en un faro para aquellos que añoraban su tierra, ofreciendo no solo información y compañía, sino un puente que conectaba corazones divididos por la distancia.

El regreso de Juana a Juxtlahuaca no fue un retorno a la comodidad, sino una extensión de su misión. Desde 2019, ha dirigido un programa en XETLA, La Voz de la Mixteca, donde comparte su lengua materna, las tradiciones ancestrales y las historias de la comunidad migrante. A través de las ondas radiales, sigue tejiendo la trama de su cultura, manteniéndola viva y vibrante.

Juana Hernández López no solo representa a las mujeres de su comunidad; representa a todas aquellas personas que han tenido que abandonar su hogar en busca de un futuro mejor. Su historia es un testimonio de resiliencia y pasión, un recordatorio de que la cultura es un tesoro que nos sigue, nos define y nos une, sin importar cuán lejos estemos de nuestro lugar de origen.

Hoy, como Diosa Centéotl y celebrando sus 65 años, Juana ilumina la Guelaguetza con su presencia y su historia, una luz de esperanza y fortaleza para todos aquellos que, como ella, creen en el poder transformador de la educación y la cultura.

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Cultura

Cuentos y dichos del niño y el adulto zapoteca espinaleño

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Profesor Luis Castillejos Fuentes / Libro El Espinal: génesis, historia y tradición / Foto: Internet

El terror a la muerte es la base del animismo primitivo de los zapotecas y los niños de antaño, mezcla resultante en alguna forma de este grupo étnico, traen consigo esta mentalidad que tiende a manifestarse en su vida cotidiana. La oscuridad de la noche era propicia para que, sentados sobre un pequeño montículo de arena fresca de río, la chamacada contara historias  sobre fantasmas: “Guenda ruchibi”. Unas veces las oían en voz de los “viejos”, otras de  algún niño que con buena memoria se las transmitía. Se hablaba del bidxaa, espíritu de alguien que se creencia le atribuye madad, que se hace presente o no, deambula en lo oscuro provocando ruidos y gritos extraños imitando la expresión gutural de algún animal. El “sombrerote,” personaje vestido elegantemente y “con mucha plata” para ofrecerla al incauto que cae en su seducción y dominio, convertirlo en su vasallo y llevarlo a vivir lejos, en la cumbre de una montaña o en alguna cueva para en un momento dado hacer el “mal” a otros, pues supónese que tiene pacto con el diablo, binidxaba. Se Cuenta también la historia de “la llorona”, mujer vestida de una blanca y sudada manta que gime desgarradoramente, ya que de esta forma expresa que su alma en pena vaga hasta que algo pendiente que ella dejó en el mundo de los vivos se vea realizado. Todos, “entes” imaginarios, pero eso sí con la creencia de ser portadores del mal y en la charla se da como si lo que se expone fuera una realidad, que aunque provoque miedo,  se torna, interesante para la mente infantil.

En el ambiente de pueblo, todo mundo se conoce, se respeta y se saluda. Y no falta alguien peculiar en su modo de ser, que lo hace distinto del otro, ya sea por poseer  congénito o adquirido algún vicio, cualidad, virtud, etc., sea por defecto físico o por algún hábito fuera de lo común que despierta curiosidad, gracia, burla, admiración y risa en niños y adultos. Este tipo de personaje se hace “relevante”, queda su dicho y su hecho para el comentario grato: Tá Llanque Castillejos “Chiquito”, empedernido tomador de mezcal, su saludo es un grito desgarrado y su gracia colocar un cigarrillo de hojas sobre sus pobladísimas cejas y exhibirse, “zou náa la o zahua lii” ese era su dicho habitual,  José “Huipa” ex-soldado de leva en la revolución, donde alcanzó el grado de cabo, traumado por lo que sufrió en sus andanzas y de mal comer en la brega, después de ingerir “anisado” marchaba solo por las calles haciendo ademanes con saludo militar. Genaro Clímaco, Naro Lele por sus largas extremidades inferiores, semejando al alcaraván, con unas copas que impactaban su cerebro le daba por filosofar: “si tu mal no tiene remedio, porqué sufres y si tu mal tiene remedio también porqué sufres” solía decir con cierta visión premonitoria hacia lo que en la vida es bueno o es malo. Ta Rafé Lluvi, músico por afición y por su adicción al “trago” ya no lo contrataban, de un instinto vivaz, con un papel u hoja verde de lambimbo sobre un peine, de su ronco pecho entonaba melodías para que algún parroquiano le obsequiara una copa y después a su “banquete” que era residuo de tortilla y sobras de comida que con los cerdos compartía en una canoa de madera. Y Tá Rafé aguantó más de un siglo a pesar de esa “vida”. Erasmo Toledo perspicaz y agudo charlador, su plática amena y entretenida despertaba interés y sus frases quedan: Naa Tá Llamo. Xi tal xa llac, le dice un amigo a otro, zaquezi naa marínu. ¿Cómo estás? es la pregunta y la respuesta, es “como siempre”, aunque hayan pasado varios años, hasta los 81, que ya pesaban sobre el cuerpo de Beto Marinu y que por lo mismo no podía conservarse igual, y tiempo después fue hallado muerto en un basurero.

 En las fiestas patrias, la noche del grito y el desfile obligado del l6 de septiembre, con la tabla calisténica organizada por el profesor Bruno Escobar Fuentes, acto muy concurrido porque era de regocijo para la gente del pueblo. Era especie de fiesta popular. Al terminar  el acto literario y el presidente municipal en turno de dar “el grito”, la concurrencia abandonaba el escenario. Quedaban algunos, ya “encopetados”, que a la voz de tribuna libre arengaban a la multitud: Ta Queño Cueto ngüí, Pedro Ché Vale, José “Huipa” y otros, lo hacían habitualmente, sus dichos incoherentes y burlones sobre algún hecho que la autoridad hacía mal, provocaba risas entre los espectadores para luego abandonar el lugar hasta el amanecer.      

Allá por los años cuarenta, antes de abrirse la carretera internacional, mercaderes oaxaqueños, “vallistos”, pasaban por Espinal, estancia de descanso después de un largo peregrinar. Cargaban sobre sus espaldas gruesas y pesadas pacas de pescado seco de san Mateo del Mar para llevar a Oaxaca. Tenían que cruzar en el trayecto la sierra de Guevea y Escuintepec y bajar a Mitla. En algún corredor de casa grande, estancia descansaban y los niños por curiosidad se asomaban y los rodeaban para hacerles picardía, robar algo de su mercancía mientras dormían y reírse de su indumentaria y de su menudo pero macizo cuerpo, al mismo tiempo, admirar su resistencia.

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El apodo para diferenciar al común ciudadano o simplemente para distinguirlo de otro, es de uso común  en los pueblos zapotecas, Al sustantivo se le acompaña con un adjetivo para la fácil identificación: así se dice de Luis “nanchi”, Luis “niño”, Luis “valor”, Luis “guitu”, de José; ché “cuachi”, ché “benda”, ché “bachana”, ché “tita”, ché “huabi”, ché “mistu”, de Antonio; Toño “morral”, Toño “músico”, Toño “neta”, Toño “llúu”, etc.

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