Cultura
César López el cantautor zapoteco de La Ventosa
Juchitán de Zaragoza, Oaxaca.- Era un hombre con temperamento fuerte, disciplinado y un tanto impaciente; pero apenas llegaba la guitarra a sus manos, su ánimo era diferente, la metamorfosis que pasaba por su ser lo llevaba a convertir aquellas tardes de música y canto, así era César López Orozco.
Nació el 3 de abril de 1946 en La Ventosa, Agencia municipal de Juchitán. Su madre fue Isabel Orozco “Na Chabé” oriunda de Juchitán, Oaxaca y su padre Román López Gómez, originario de La Ventosa, Agencia perteneciente al Municipio Juchiteco.
Se inició en la composición a la edad de 16 años y dentro de su quehacer musical hizo cientos de temas en su idioma el zapoteco, que pudo registrar en más de una decena de materiales fonográficos, que fueron del gusto de los lugareños hablantes de esta lengua materna.
Campesino, albañil y músico, César López fue un hombre polifacético que dejó un legado invaluable a la cultura: sus canciones. Aunque su obra se presenta magnífica a todo público, en vida fue escaso el reconocimiento que recibió de los círculos intelectuales; siendo, en cambio, inmenso el cariño y admiración que le concedieron los hombres y mujeres humildes, por cantarle al campo, al amor y a la vida cotidiana.
Este magnífico intérprete y compositor de la trova zapoteca, tuvo participación en diferentes festivales así como eventos sociales de la región del istmo, principalmente en las comunidades cercanas a Juchitán, donde frecuentemente se le contrataba para amenizar las fiestas.
Minutos antes de iniciar su concierto, se coordinaba con sus músicos que lo acompañaron, entre los que destacaban Pedro Gómez, Pablo Jerónimo, Jesús Rasgado, David “Chalupa”, y el que redacta estas líneas, quienes en alguna etapa de la vida del trovador, tuvimos la fortuna de conocerlo y disfrutar a su lado, su música, su canto y la ejecución de su requinto.
César López pasó varios años de su vida en la cárcel, purgando una condena por el asesinato de Rosa Teru, quien fuera su pareja.
Desde las rejas donde habitó, compuso muchas canciones, pero destaca una que describe el día de la boda de su hermano menor; Saa Guendaxhela, un canto cargado de emoción y nostalgia.
Es autor de temas como Rosita, Petrona de Neza Guete’, Guze ngupi, Ra bizee, Sicaru Guidxilayu, Na Chabé, que son algunos de los temas que se siguen interpretando, principalmente en las tradicionales bodas zapotecas de la región del istmo.
Bacanda es un tema que generó polémica debido a que algunos de sus detractores, asegura que esta canción es de la autoría de Juan Jiménez “Juan Stubi”, otro importante compositor de esta ciudad, sin embargo, sin entrar en detalles ni en polémica, destacamos que esta es una de las más bellas canciones creadas en esta tierra.
La última etapa de su vida la pasó a lado de sus seres queridos en su natal La Ventosa, donde el 15 de agosto del año 2007, deja0ra de existir físicamente, para convertirse en hijo predilecto de estas tierras zapotecas.
Cultura
Juana Hernández López: La Voz de la Mixteca que resuena en la Guelaguetza 2024
Una vida de lucha y dedicación que une fronteras y preserva la riqueza cultural de su comunidad
Oaxaca de Juárez, Oaxaca.- (Cortamortaja) 22 de Junio de 2024.- En el corazón de la Guelaguetza, la festividad más emblemática de Oaxaca, ha emergido una figura que encarna la resistencia, el amor por la cultura y la dedicación incansable a su comunidad. Juana Hernández López, originaria de Santiago Juxtlahuaca, ha sido coronada como la Diosa Centéotl 2024, una distinción que celebra no solo su belleza y carisma, sino también su extraordinaria trayectoria y compromiso social. Hoy, en un momento aún más significativo, Juana celebra su 65 cumpleaños, un detalle que añade más emoción y significado a su historia de vida.
Juana no es solo una docente de español e historia; es una narradora de la realidad y una guerrera por la justicia educativa. Su camino ha estado marcado por la adversidad y la migración, habiendo tenido que dejar su amado Juxtlahuaca para buscar oportunidades en Estados Unidos. Esta experiencia no la quebrantó, sino que la fortaleció, convirtiéndola en una voz poderosa para la comunidad migrante mixteca.
En Fresno, California, Juana tomó las riendas de Radio Bilingüe, entendiendo que cuando los migrantes cruzan las fronteras, llevan consigo más que pertenencias; llevan su lengua, su cultura y su identidad. Desde los micrófonos de la radio, Juana se convirtió en un faro para aquellos que añoraban su tierra, ofreciendo no solo información y compañía, sino un puente que conectaba corazones divididos por la distancia.
El regreso de Juana a Juxtlahuaca no fue un retorno a la comodidad, sino una extensión de su misión. Desde 2019, ha dirigido un programa en XETLA, La Voz de la Mixteca, donde comparte su lengua materna, las tradiciones ancestrales y las historias de la comunidad migrante. A través de las ondas radiales, sigue tejiendo la trama de su cultura, manteniéndola viva y vibrante.
Juana Hernández López no solo representa a las mujeres de su comunidad; representa a todas aquellas personas que han tenido que abandonar su hogar en busca de un futuro mejor. Su historia es un testimonio de resiliencia y pasión, un recordatorio de que la cultura es un tesoro que nos sigue, nos define y nos une, sin importar cuán lejos estemos de nuestro lugar de origen.
Hoy, como Diosa Centéotl y celebrando sus 65 años, Juana ilumina la Guelaguetza con su presencia y su historia, una luz de esperanza y fortaleza para todos aquellos que, como ella, creen en el poder transformador de la educación y la cultura.
Cultura
Cuentos y dichos del niño y el adulto zapoteca espinaleño
Profesor Luis Castillejos Fuentes / Libro El Espinal: génesis, historia y tradición / Foto: Internet
El terror a la muerte es la base del animismo primitivo de los zapotecas y los niños de antaño, mezcla resultante en alguna forma de este grupo étnico, traen consigo esta mentalidad que tiende a manifestarse en su vida cotidiana. La oscuridad de la noche era propicia para que, sentados sobre un pequeño montículo de arena fresca de río, la chamacada contara historias sobre fantasmas: “Guenda ruchibi”. Unas veces las oían en voz de los “viejos”, otras de algún niño que con buena memoria se las transmitía. Se hablaba del bidxaa, espíritu de alguien que se creencia le atribuye madad, que se hace presente o no, deambula en lo oscuro provocando ruidos y gritos extraños imitando la expresión gutural de algún animal. El “sombrerote,” personaje vestido elegantemente y “con mucha plata” para ofrecerla al incauto que cae en su seducción y dominio, convertirlo en su vasallo y llevarlo a vivir lejos, en la cumbre de una montaña o en alguna cueva para en un momento dado hacer el “mal” a otros, pues supónese que tiene pacto con el diablo, binidxaba. Se Cuenta también la historia de “la llorona”, mujer vestida de una blanca y sudada manta que gime desgarradoramente, ya que de esta forma expresa que su alma en pena vaga hasta que algo pendiente que ella dejó en el mundo de los vivos se vea realizado. Todos, “entes” imaginarios, pero eso sí con la creencia de ser portadores del mal y en la charla se da como si lo que se expone fuera una realidad, que aunque provoque miedo, se torna, interesante para la mente infantil.
En el ambiente de pueblo, todo mundo se conoce, se respeta y se saluda. Y no falta alguien peculiar en su modo de ser, que lo hace distinto del otro, ya sea por poseer congénito o adquirido algún vicio, cualidad, virtud, etc., sea por defecto físico o por algún hábito fuera de lo común que despierta curiosidad, gracia, burla, admiración y risa en niños y adultos. Este tipo de personaje se hace “relevante”, queda su dicho y su hecho para el comentario grato: Tá Llanque Castillejos “Chiquito”, empedernido tomador de mezcal, su saludo es un grito desgarrado y su gracia colocar un cigarrillo de hojas sobre sus pobladísimas cejas y exhibirse, “zou náa la o zahua lii” ese era su dicho habitual, José “Huipa” ex-soldado de leva en la revolución, donde alcanzó el grado de cabo, traumado por lo que sufrió en sus andanzas y de mal comer en la brega, después de ingerir “anisado” marchaba solo por las calles haciendo ademanes con saludo militar. Genaro Clímaco, Naro Lele por sus largas extremidades inferiores, semejando al alcaraván, con unas copas que impactaban su cerebro le daba por filosofar: “si tu mal no tiene remedio, porqué sufres y si tu mal tiene remedio también porqué sufres” solía decir con cierta visión premonitoria hacia lo que en la vida es bueno o es malo. Ta Rafé Lluvi, músico por afición y por su adicción al “trago” ya no lo contrataban, de un instinto vivaz, con un papel u hoja verde de lambimbo sobre un peine, de su ronco pecho entonaba melodías para que algún parroquiano le obsequiara una copa y después a su “banquete” que era residuo de tortilla y sobras de comida que con los cerdos compartía en una canoa de madera. Y Tá Rafé aguantó más de un siglo a pesar de esa “vida”. Erasmo Toledo perspicaz y agudo charlador, su plática amena y entretenida despertaba interés y sus frases quedan: Naa Tá Llamo. Xi tal xa llac, le dice un amigo a otro, zaquezi naa marínu. ¿Cómo estás? es la pregunta y la respuesta, es “como siempre”, aunque hayan pasado varios años, hasta los 81, que ya pesaban sobre el cuerpo de Beto Marinu y que por lo mismo no podía conservarse igual, y tiempo después fue hallado muerto en un basurero.
En las fiestas patrias, la noche del grito y el desfile obligado del l6 de septiembre, con la tabla calisténica organizada por el profesor Bruno Escobar Fuentes, acto muy concurrido porque era de regocijo para la gente del pueblo. Era especie de fiesta popular. Al terminar el acto literario y el presidente municipal en turno de dar “el grito”, la concurrencia abandonaba el escenario. Quedaban algunos, ya “encopetados”, que a la voz de tribuna libre arengaban a la multitud: Ta Queño Cueto ngüí, Pedro Ché Vale, José “Huipa” y otros, lo hacían habitualmente, sus dichos incoherentes y burlones sobre algún hecho que la autoridad hacía mal, provocaba risas entre los espectadores para luego abandonar el lugar hasta el amanecer.
Allá por los años cuarenta, antes de abrirse la carretera internacional, mercaderes oaxaqueños, “vallistos”, pasaban por Espinal, estancia de descanso después de un largo peregrinar. Cargaban sobre sus espaldas gruesas y pesadas pacas de pescado seco de san Mateo del Mar para llevar a Oaxaca. Tenían que cruzar en el trayecto la sierra de Guevea y Escuintepec y bajar a Mitla. En algún corredor de casa grande, estancia descansaban y los niños por curiosidad se asomaban y los rodeaban para hacerles picardía, robar algo de su mercancía mientras dormían y reírse de su indumentaria y de su menudo pero macizo cuerpo, al mismo tiempo, admirar su resistencia.
El apodo para diferenciar al común ciudadano o simplemente para distinguirlo de otro, es de uso común en los pueblos zapotecas, Al sustantivo se le acompaña con un adjetivo para la fácil identificación: así se dice de Luis “nanchi”, Luis “niño”, Luis “valor”, Luis “guitu”, de José; ché “cuachi”, ché “benda”, ché “bachana”, ché “tita”, ché “huabi”, ché “mistu”, de Antonio; Toño “morral”, Toño “músico”, Toño “neta”, Toño “llúu”, etc.
-
Istmo3 meses
BIAANI BELEGUI SÁNCHEZ LÓPEZ BUSCA EL CETRO DE DIOSA CENTÉOTL 2024 PARA JUCHITÁN
-
Cultura3 meses
Juana Hernández López: La Voz de la Mixteca que resuena en la Guelaguetza 2024
-
Nacionales3 meses
Pensión del Bienestar 2024: Estas son las FECHAS para recibir tu PAGO en JULIO
-
Istmo3 meses
Mexicana de Aviación anuncia nuevos vuelos a Ixtepec #Oaxaca
-
Seguridad3 meses
VIDEO: Captan Ataque a balazos en Salina Cruz Oaxaca
-
Deportes2 meses
¡Bronce! Para “Pumas-Ixtaltepec” en torneo nacional de futbol
-
Istmo1 mes
Iberdrola México lanza becas de especialización en urología para personal médico y de enfermería
-
Nacionales4 meses
VIDEO. Mujer muere por intentar tomarse una selfie junto a locomotora de vapor en Hidalgo